Como se llama la mezcla de estilos en decoración

Ya que que suerte. De eso es de lo que hablamos el día de hoy y tengo ciertos avisos para ti que te dejarán combinar estilos como un profesional y, con suerte, salir de la rutina creativa donde te hallas y ingresar en un novedoso universo.

Si lo que verdaderamente buscas es conocer cuál es tu estilo y conocer de qué forma hacer verdaderamente un espacio donde todo tenga sentido, puedes empezar respondiendo nuestro cuestionario sobre estilo, te va a ayudar a aclarar tu cabeza .

Los diez estilos de decoración de interiores mucho más populares

Es una inclinación que tomó mucha fuerza en los últimos tiempos. El origen de este género de decoración está en Noruega, Suecia, Finlandia y Dinamarca, donde los días radiantes son pocos la mayoría del año, con lo que se ha buscado la forma de suplir esta falta de luz. Hallaron la solución en colores claros y elementos relacionados con la naturaleza.

La naturaleza del bosque y las montañas son la primordial inspiración de este estilo, con lo que apreciamos que en la mayor parte de las situaciones hay muebles o elementos de madera en la mitad de paredes de color gris claro, afín al cielo de esos países. de nubes pálidas.

4 fórmulas para combinar estilos en decoración

Este comedor de tonos neutros mezcla varios estilos y acabados pero un número tan con limite de colores provoca que el grupo ande.

– Estilo minimalista

Si le cuestiones a un decorador… ¿Cuál es el más destacable estilo de decoración? O explicado de otra forma, qué ámbito es mucho más simple de armonizar, de manera directa te afirmará que el estilo minimalista para hogares es la opción mucho más rápida. La reducción de los elementos ornamentales a la mínima expresión es el lema de esta insaciable inclinación en el interiorismo de los interiores y exteriores de las viviendas.

¿Tienes ganas de saber cuáles son los 7 estilos mucho más populares en decoración de interiores?

El modernismo fue un movimiento de vanguardia en todo el mundo que brotó a fines del siglo XIX y principios del XX y se extendió a prácticamente todas las artes, dentro la arquitectura y el diseño. Encuadrada en una era de avance industrial, esta corriente artística pretendía crear en lo estético, en lo formal, sin ignorar la herramienta real de los elementos.

El desarrollo de producción se ha conjuntado con la elaboración artesanal, sosteniendo de esta forma la distinción de los elementos con la ocupación. Este trabajo valió la pena y condujo a una revolución en las construcciones. Se consiguieron desenlaces excelentes jugando con el cristal, el metal, el hierro forjado o diversos tipos de madera, materiales donde la calidad siempre y en todo momento prima.