Como hacer queso provolone al microondas

De qué manera realizar queso provolone al horno

1.- Comencemos por elaborar la salsa de tomate casera. Prueba a proseguir mi receta que te sale realmente bien y si tienes la tuya hazla. Si te ofrece pereza y no deseas llevar a cabo tomate en el hogar, puedes adquirirlo ahora hecho. 2.- En este momento precalienta el horno a 200º arriba y abajo. En una olla de barro ponemos una base de salsa de tomate y encima el queso. Añada el orégano y ponga en el horno hasta el momento en que se funda y se dore. 3.- Ser útil con pan y listo.

PREPARACIÓN

1. Poner una base de salsa de tomate en la sartén.

Elementos

  • Rodajas de provola.
  • 2 medidas de cuchara de tomate frito.
  • Condimentas al gusto
      1. El paso inicial es tener un envase capaz para microondas y que tenga dentro suyo, aproximadamente, el tamaño de una rodaja de provola. Los tazones de arcilla son especiales, tanto para muestras utilitarias como rústicas.
      2. Contar con el tomate frito en la base del plato o envase.

        Podrías reemplazarlo por rodajas de tomate crudo, y quedaría mucho más rápido y fresco, pero como es un plato fuerte y calórico, vamos con todo. Sobre esta base, asimismo podría añadir ciertos elementos mucho más. Las cebollas caramelizadas, las berenjenas prefritas o las alcaparras en escabeche quedan excelente.
      3. Ponga toda la rueda sobre la base, como se provee en el bulto. Prueba a aplastarlo un tanto hasta el momento en que mires tomates fritos saliendo por los lados.
      4. Es la hora de las condimentas. Aquí puedes crear cuanto quieras, si bien mi recomendación es emplear condimentas socias a la comida italiana. En mi caso me agrada utilizar la próxima masa, que tengo lista; tomate seco, pimienta negra, ajo, albaca, orégano, guindilla y cebolla roja. Todo ello en polvo, si bien si tuvieses albaca fría el resultado sería mejor.
      5. Llegamos al último paso. Ponga el envase en el microondas y póngalo a máxima capacidad a lo largo de 2 minutos. Simple y veloz. Ojo en el momento en que esté listo, puesto que el envase puede estar muy ardiente y no tenemos ganas quemarnos. Una vez fuera se debe tener precaución con una cosa, que no se enfríe. Acompáñalo de finas rebanadas de pan torrado y te quitará la envidia de comer pizza. Aun podrías rematarlo con un toque dulce que lo realice explotar; una mermelada casera.